
Hace algo más de un año a Puppy le veía todos los días cuando llegaba a la oficina.
Desde entonces trabajo en otro lugar y no frecuento esta zona. Y algo que antes era habitual ahora no lo es.
Lo que más echo de menos es el café del mediodía.

Hace algo más de un año a Puppy le veía todos los días cuando llegaba a la oficina.
Desde entonces trabajo en otro lugar y no frecuento esta zona. Y algo que antes era habitual ahora no lo es.
Lo que más echo de menos es el café del mediodía.
hermosa obra y como no amarla o no prestarle atención imposible
Me gustaLe gusta a 2 personas
Wow!
Me gustaMe gusta