El camino se va complicando por la espesa vegetación. Da gusto ver árboles y plantas pero cuando es en exceso es un poco agobiante.
Finalmente aparece un gran higuera.
Estos árboles me recuerdan cuando de niño subía con amigo a las higueras que habían en mi barrio al lado de una gran acería y nos poníamos morados a comer higos.
Después de despejarse el camino, aparece la imagen fantasmagórica de una casa de montaña que la vegetación a engullido.
¿Quién viviría aquí?¿Qué ocurriría para abandonar esta preciosa vivienda en este mágico lugar?
Muy bien!
Me gustaLe gusta a 1 persona
Muchas gracias 😊😊
Me gustaLe gusta a 1 persona
De nada!
Me gustaLe gusta a 1 persona
😊
Me gustaLe gusta a 1 persona
Wonderful
http://www.designercountry.com/
Me gustaLe gusta a 1 persona