Que bonita es la palabra anaranjado. La puedes ver al empezar y al finalizar el día.
Si la ves a la mañana, poco a poco tu cara irá notando el calorcito del sol. Sin has sido el afortunado que la ha visto al atardecer, una brisa fresca dará paso a la oscuridad de la noche.
Si es que la pronuncias y te sube la vitamina C de repente.
¡Que ganas!